miércoles, 10 de junio de 2009

¿Cómo negarme?





Sus labios rozaron mis párpados mientras me silenció. “Puedo detenerlo” dijo; su voz era exquisitamente intoxicante. Siempre he tenido una fijación en las voces, me hacen gemir, y la suya me hacía sentir que me estaba lamiendo el cerebro. Me quedé callada por un momento, solo pasa saciar mi anhelo de sus desteñidos suspiros. “Puedo detenerlo” gruñó mientras sus dedos, gentilmente, envolvían mi cuello; me hacía sentir de cristal. Asentí mientras una de sus manos se enredaba en mi cabello, sosteniendo mi nuca. Mis labios se separaron unos milímetros cuando el inclinó mi cabeza hacia atrás. Su otra mano reptó hacia mis clavículas, se deslizó a mi cuello y se detuvo en mi párpado… Sentí sus uñas rebanar mis lacrimales, lenta y casi tiernamente. Dejé de llorar por primera vez en dos meses.








Foto por: http://aglayan-agac.deviantart.com/

No hay comentarios: